viernes, 28 de agosto de 2009
ORGANIZACION
Todos conocemos a una o varias personas que son como super heroes: trabajan, cuidan a los niños, van a clase de idiomas y sacan tiempo para todo. El otro día estuve con una profesora que habla cinco idiomas, tiene dos hijos, toca el violín en una orquesta y está al día de todo lo que pasa en la actualidad. Y yo a menudo me pregunto: ¿de dónde saca el tiempo la gente? Y creo que la respuesta está en saber organizarse.
También es verdad que cuanto más tiempo se tiene menos se hace, o más vago se está... Y la era tecnológica en la que vivimos no ayuda mucho, eso es cierto, ya que estamos bombardeados por la televisión, internet, el cine, los videojuegos, los teléfonos móviles...Yo tengo días en los que quiero meterme un rato en youtube y al final estoy tres horas y siento que no he hecho nada productivo.
Aunque uno sea un desastre a la hora de planificarse nunca es tarde para mejorar, y ahora que está a punto de empezar el siguiente año académico pienso que es el momento ideal para coger el toro por los cuernos y sacar partido del tiempo que se tiene. ¿Por dónde empezamos? Bueno, uno de los mejores métodos es el de tener un diario o una agenda. En ella podemos anotar las actividades que vamos a realizar durante la semana, y un buen truco es ordenarlas por orden prioritario.
Como ya he comentado alguna vez es importante tener buenos hábitos, y uno de ellos es el de dedicar al menos 15 minutos al final del día a poner en orden nuestras prioridades y escribirlas en la agenda. Así, si repetimos este acto día tras día será algo mecánico y no nos costará hacerlo. Además nos ahorrará mucho tiempo a la larga. Es como el pensar en la ropa que vas a llevar al día siguiente por la noche en vez de hacerlo por la mañana, cuando se tiene mucha prisa y el tiempo pasa volando...
Cada uno debe encontrar sus truquillos, pero creo que es importante tener en mente los objetivos que se pretenden conseguir. Así, trasladándonos al campo de los idiomas, si uno quiere aprender o mejorar es importante dedicar cada día un poco de tiempo, estar en contacto con el idioma, y más vale hacer un poco cada día que estudiar mucho de golpe en una sola sesión, ya que la información no se retiene tan bien.
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